En la mitología nórdica, Ragnarök es la batalla del fin del mundo. Esta batalla será entre los Æsir, liderados por Odín y los gigantes de fuego liderados por Surt, a los cuales también se les une los jotuns liderados por Loki, y casi todo en el universo será destruido.
En el Ragnarök, los dioses ya saben a través de la profecía lo que va a suceder: qué avisará de la llegada del acontecimiento,
quién será asesinado por quién, y así sucesivamente. Incluso saben que
ellos no tienen el poder de evitar el Ragnarök.
El Ragnarök será precedido por el Fimbulvetr, el Invierno
de Inviernos: tres inviernos sucesivos se seguirán uno a otro sin
verano. Como resultado, explotarán los conflictos y las peleas, y todos
los mortales desaparecerán.
Después de una persecución perpetua, el lobo Sköll y su hermano Hati devorarán a la diosa Sól y a su hermano Máni. Las estrellas desaparecerán, sumiendo la tierra en la oscuridad.
La tierra se estremecerá tan violentamente que los árboles serán arrancados de raíz y las montañas caerán; Loki y su hijo, el lobo Fenrir, serán liberados.
Eggthér, el vigilante de los Jotuns, se sentará en su tumba y rasgará su arpa. El gallo rojo Fjalar cantará a los gigantes y el gallo de oro Gullinkambi cantará a los dioses. Un tercer gallo, de color rojo óxido, levantará a los muertos en Hel.
Eggthér, el vigilante de los Jotuns, se sentará en su tumba y rasgará su arpa. El gallo rojo Fjalar cantará a los gigantes y el gallo de oro Gullinkambi cantará a los dioses. Un tercer gallo, de color rojo óxido, levantará a los muertos en Hel.
Jörmundgander, la serpiente de Midgard,
se levantará del lecho profundo del océano para dirigirse hacia la
Tierra, provocando que
los mares se alcen y azoten contra la tierra. Con cada respiración, la
serpiente arrojará veneno, salpicando la Tierra y el Cielo con él.
De las tierras del este, el ejército de Jotun, conducido por Hrym, saldrá de su hogar en Jötunheim y navegará en la espantosa nave Naglfar (fabricada con las uñas de hombres muertos), hacia los campos de batalla de Vigrid. Desde el norte, una segunda nave dirigirá sus velas hacia Vigrid, con
Loki.
En medio de esta agitación, los gigantes de fuego de Muspelheim, conducidos por Surt, avanzarán hacia el sur y partirán en dos el mismísimo cielo, cerca de Vigrid, dejando todo a su paso ardiendo en llamas. Mientras cabalgan hacia Bifrost, el puente del arco iris, éste se agrietará y se romperá tras ellos. Garm, el perro del infierno, también conseguirá liberarse, y se unirá a los gigantes de fuego. De esta manera, todos los Jotuns y todos los habitantes de Hel,
Fenrir, Jormundgander, Garm, Surt y los hijos ardientes de Muspelheim,
se reunirán en Vigrid.
Mientras tanto, Heimdall, hará sonar su cuerno Gjallarhorn, que será oído a través de los nueve mundos. Todos los
dioses despertarán e inmediatamente se reunirán en consejo. Después, Odín montará Sleipnir y galopará a la morada de Mimer para consultarle sobre el destino de su pueblo.
Entonces, Yggdrasil, se sacudirá desde la raíz a la copa. Todo en la tierra, el cielo y Hel temblará. Todos los Æsir y Einherjer se pondrán sus vestimentas de batalla. Este extenso ejército marchará hacia Vigrid y Odín cabalgará al frente, blandiendo su lanza Gungnir.
Freyr se enfrentará a Surt, pero será el primero de todos los dioses en morir. Tyr
logrará matar a Garm, pero morirá poco después de que el mundo sea destruido por el fuego. Heimdall se encontrará con Loki, y ninguno sobrevivirá. Thor matará a Jörmungandr con su martillo Mjölnir,
pero morirá a causa del veneno de la serpiente. Odín peleará contra Fenrir, pero será devorado por él lobo. Para vengar a su padre, Vidar, pondrá un pie en la quijada del lobo, y con una mano en la otra, quebrará su garganta, matándole por fin.
Entonces, Surt
quemará el universo entero con fuego. La muerte llegará a todos los
seres en la Tierra. El sol se apagará y las estrellas desaparecerán de
los cielos. Surgirán vapores tóxicos y las llamas estallarán, abrasando
el cielo con el fuego. Finalmente, la tierra se hundirá en el mar.
Fuente: Wikipedia