viernes, 30 de noviembre de 2018

AQUELOO

     En la mitología griega, Aqueloo era el dios del río del mismo nombre, entre Etolia y Acarnania, y el más antiguo y poderoso de los espíritus de agua en Grecia. 

     Era un oceánida, el primogénito de Océano y Tetis, o según otras versiones, de Océano y Gea o de ésta y Helios. Según Hesiodo, Poseidon o Gea le hicieron dios del río y gobernante de todos los peces y tritones que lo habitan. En algunas monedas de Acarnania se representaba a Aqueloo como un toro con cabeza de hombre. También aparece como un anciano con dos cuernos, pelo gris y barba hirsuta de la que constantemente mana agua.

    Otras leyendas vienen de Egipto, y lo describen como un segundo Nilo. Aqueloo era muy respetado en la antigua Grecia. Su nombre se invocaba en oraciones, sacrificios y a la hora de hacer juramentos. El oráculo de Zeus en Dodona añadía a cada respuesta que daba la orden de ofrecer sacrificios a Aqueloo. Según cuenta Virgilio, este culto se debía a que Aqueloo terminó representando a todos los ríos y aguas dulces, fuentes de la agricultura y, por tanto, de la vida de los hombres.

     Aqueloo era pretendiente de Deyanira, hija de Eneo, rey de Calidón, pero fue derrotado por Heracles, que después se casaría con ella.

    En la lucha, Aqueloo se transformó en serpiente y después en toro, momento que aprovechó Heracles para derribarle y arrancarle uno de sus cuernos, que sólo recuperó a cambio del cuerno de Amaltea, llamado cuerno de la abundancia. Según Ovidio fue el mismo cuerno de Aqueloo el que las náyades recogieron y convirtieron en la cornucopia, símbolo de prosperidad. Heracles obligó al vencido a refugiarse en el río Toas, que desde entonces se llamó Aqueloo. La forma de serpiente de Aqueloo alude a la sinuosidad de su curso, y la de toro, a la fuerza de sus inundaciones y al bramido de sus aguas. Heracles uniformó su cauce poniéndole diques y reuniendo en un sólo lecho los dos brazos de su curso (de aquí que le dejara con un cuerno sólo). El cauce arreglado del Aqueloo fue la causa de la riqueza del país que regaba con sus aguas, de donde vendría lo del cuerno de la abundancia.

     Este río fue formado por las copiosas lágrimas que derramó Níobe cuando Apolo y Artemisa mataron con sus flechas a todos sus hijos menos a Melibea, en castigo por haberse burlado de su madre Leto por haber tenido ésta sólo dos hijos.

     Otra versión alternativa sobre la formación del río afirma que cuando Aqueloo perdió a sus hijas las sirenas, estaba tan afligido que, invocando a Gea, ésta le acogió en su seno. En el punto mismo donde la Tierra le recibió, surgió el caudaloso manantial que formó el río.

     Cuando el rey Hipodamante arrojó a su hija Perimela desde un acantilado, Aqueloo la salvó y la convirtió en su esposa. Otras fuentes mencionan que de una hija de Eolo llamada Perimede, sin que quede claro que se trate de la misma que la mencionada anteriormente, tuvo a Hipodamante y a Orestes. Además era el padre de las sirenas, bien con la musas Melpómene o Terpsícore, o bien con su propia nieta, Estérope. Varias ninfas eran hijas suyas, siendo las más conocidas Pirene, Calírroe, Castalia y Dirce.

     Alojó a Teseo cuando éste volvía de la caza del jabalí de Calidón, narrándole la forma en que había creado las islas que había en la desembocadura del río. Cuando Alcmeón mató a su madre, ésta le maldijo con ser perseguido por las Erinias en todas las tierras conocidas. Por esto el matricida se refugió en unas islas que había creado Aqueloo después de su crimen y que, por lo tanto, no estaban mencionandas en la maldición. Se alojó allí y se casó con Calírroe, la hija del dios-río cuya vanidad sería fatal para su esposo.

Fuente: Wikipedia

GALATEA

Galatea y Acis, escultura de Auguste Ottin
     En la mitología griega existen varios personajes con el nombre de Galatea:

          1-GALATEA: Una nereida de Sicilia amada por el cíclope Polifemo. Sus padres eran Nereo y Doris. Cuando Galatea rechazó al cíclope en favor de Acis, un pastor siciliano, Polifemo, celoso, lo mató aplastándolo con una enorme piedra. Desesperada por el dolor, Galatea transformó la sangre de su amante en el río Acis (en Sicilia). Según el historiador Apiano, Galatea terminó siendo madre con Polifemo de Celto, Ilirio y Gala, dioses epónimos de los celtas, los ilirios y los gálatas, respectivamente.

          2-GALATEA: Estatua erigida por el rey de Chipre Pigmalión, cuya historia narra Ovidio en el libro décimo de sus Metamorfosis.​ Al rey no le gustaban las mujeres porque las consideraba quisquillosas e imperfectas, y llegó a la conclusión de que no quería casarse con nadie y vivió sin ningún tipo de compañía femenina. Con el paso del tiempo, el rey se sintió solo, y empezó a esculpir una estatua de marfil muy bella y de rasgos perfectos. De tanto admirar su obra, se enamoró de ella. En una de las grandes celebraciones en honor a la diosa Afrodita que se celebraba en la isla, Pigmalión suplicó a la diosa que diera vida a su amada estatua. La diosa, que estaba dispuesta a atenderlo, elevó la llama del altar del escultor tres veces más alto que la de otros altares. Pigmalión no entendió la señal y se fue a su casa muy decepcionado. Al volver a casa, contempló la estatua durante horas. Después de mucho tiempo, el artista se levantó, y besó a la estatua. Pigmalión ya no sintió los helados labios de marfil, sino que sintió una suave y cálida piel en sus labios. Volvió a besarla, y la estatua cobró vida, enamorándose perdidamente de su creador. Venus terminó de complacer al rey concediéndole a su amada el don de la fertilidad. De esa unión nació su hijo Pafos, que dio su nombre a la ciudad de Pafos, y su hija Metarme.

          3-GALATEA: Era una cretense, hija de Euritio y casada con Lampro. Galatea quedó embarazada, y su esposo le dijo que si era una niña, se desharía de ella. Cuando dio a luz a una preciosa niña, ella no tuvo corazón para abandonarla.

     Desesperada, acudió a unos adivinos quienes le aconsejaron que la vistiera como varón, y le diera por nombre Leucipo, para que así su esposo no se diera cuenta de la verdad. Con los años, Leucipo se volvió muy hermosa y llegó el momento en que ya no se podía ocultar su verdadero sexo.

     Temiendo por la vida de su hija, Galatea acudió al templo de Leto (madre de Apolo y Artemisa), donde pidió a la diosa que cambiara el sexo de su niña. Leto se apiadó de sus súplicas y la hermosa doncella fue convertida en un guapo varón.

Fuente: Wikipedia, https://mitosyleyendascr.com/

domingo, 25 de noviembre de 2018

ALÓADAS

     En la mitología griega los Alóadas eran dos gemelos llamados Oto y Efialtes, hijos de Poseidón e Ifimedea, esposa de Aloeo y por quien son así llamados. Eran gigantes fuertes y agresivos, que ya medían seis codos y medio de alto a los doce años de edad.

     Poseidón, que sedujo a la mortal Ifimedea mezclándose con el río Enipeo, y engendró a esos dos gigantes echándose agua del río sobre su regazo.

     Los Alóadas quisieron tomar el monte Olimpo, y apilaron el monte Osa sobre el Pelión (los cuales miden 1550 y 1650 metros), para llegar hasta allí, pero los mató Apolo.

     Según otra versión, lograron secuestrar a Ares y le mantuvieron preso en una vasija de bronce encadenado durante trece meses. Fue liberado cuando Artemisa se ofreció a acostarse con Oto, lo que hizo que Efialtes sintiera envidia y pelearan. La diosa se transformó en cierva y huyó. Los Alóadas, que no querían dejarla escapar, arrojaron las lanzas y así cada uno mató al otro.

     Los Alóadas fueron castigados en el Tártaro, a permanecer atados con serpientes a una columna sobre la que había posada una lechuza dándose siempre la espalda.

     Algunos consideran a los Alóadas como caritativos, por fundar ciudades y enseñar cultura a la humanidad. Específicamente, en Naxos y la beocia Ascra, dos ciudades de las que fundaron, la pareja era muy venerada.

Fuente: Wikipedia

CRATOS / KRATOS

Kratos, personaje del videojuego "God of War"
     En la mitología griega, Cratos era la personificación masculina de la fuerza y del poder. Era hijo del titán Palas y de Estigia, y formaba parte del séquito de Zeus junto a su hermano Zelo y sus hermanas Bía y Niké.

     Participó en la lucha contra los gigantes (Gigantomaquia), y en la lucha contra los titanes (Titanomaquia). También ayudó a Hefesto y a Bía a encadenar y cegar a Prometeo, cuando éste fue sorprendido robando el fuego de los dioses para entregarlo a los hombres.

     Actualmente, en la saga del Videojuego "God of War", el personaje principal esta inspirado en Cratos, aunque en el juego, su nombre es Kratos.

Fuente: Wikipedia

jueves, 22 de noviembre de 2018

ENDIMIÓN

La Visión de Endimión, de Edward John Poynter
     En la mitología griega, Endimión era hijo de Etlio y Cálice, hija de Eolo. Llevó a una parte de los eolios, que era una antiguas tribus griegas, descendientes de Eolo, desde Tesalia hasta Élide, donde desplazó a Clímeno, el cretense, hijo de Cardis proclamándose rey de Élide. 

     Otras fuentes afirman que, fue su padre Etlio el primer rey de Élide, sucediéndole Endimión en el trono.​ Su esposa es llamada de varias maneras: Neis, Ifianasa,​ Asterodia, Cromia o Hiperipa. Sus hijos fueron Epeo, Peón, Etolo y Eurícide. Se le considera uno de los precursores de los Juegos Olímpicos ya que hizo que sus hijos corriesen una carrera en Olimpia cuyo vencedor sería el heredero del trono. Venció Epeo, quien le sucedió.

     En otra versión era un pastor de Asia Menor, que se enamoró la luna. Todas las noches, dormía dentro de una cueva que utilizaba de refugio. Pero si el tiempo era bueno, dormía en la puerta de la cueva, al aire libre, observando a Selene, hasta caer dormido.

     Selene una noche bajó a la tierra, le vio dormido y se enamoró de él. Desde entonces le visitó todas las noches, le encontró siempre dormido, y se recostó junto a él sin despertarle.

     Endimión no sabía que durante sus sueños se volvía objeto de amor de la diosa. Hasta que una noche despertó y se enteró de que era el amante de la diosa. Ambos se confesaron su amor secreto y la felicidad los envolvió. Pero entonces empezó a temer su envejecimiento. Le pidió a Selene que le concediera juventud eterna con su poder divino. Ella recurrió a Zeus y éste decidió que Endimión no sufriría el paso del tiempo mientras estuviese dormido; sólo envejecería durante la vigilia.

     Endimión le hizo prometer a Selene que lo acompañase siempre mientras él durmiera. De ese modo, él no envejecería y siempre que se despertaría feliz. Cada noche, Selene lo visitaba donde dormía en el monte Latmo, en Asia Menor. Selene y Endimión tuvieron cincuenta hijas, entre ellas Naxos.

Hay una tradición que señala que su tumba se encontraba en el estadio de Olimpia en el lugar de salida de los corredore.​

Fuente: Wikipedia, https://sobreleyendas.com/