lunes, 18 de febrero de 2019

HÉSPERO

Planeta Venus
     En la mitología griega Héspero es el “lucero vespertino”, el planeta Venus visto por la tarde. Es el hijo de Eos, la diosa del amanecer (Aurora en la mitología romana) y es hermano de Eósforo (también llamado Heósforo o Fósforo, el “lucero del alba”, cuyo equivalente romano es Lucifer). El padre de Héspero era Céfalo, un mortal, mientras que el de Eósforo era el titán estelar Astreo.

     La designación del mismo con dos nombres distintos, según el momento de su vislumbramiento ("Eósforo" por la mañana y "Héspero" por la tarde) es otro indicio de que antiguamente eran considerados dos objetos celestes diferentes. Fuentes griegas tardías​ atribuían a Pitágoras o a Parménides el descubrimiento de que en realidad se trataba del mismo cuerpo celeste (para los griegos una "estrella errante", es decir, un planeta). De esta verificación procede la identificación del planeta con Afrodita entre los griegos y Venus entre los romanos. Sin embargo, fueron los astrónomos babilonios los primeros que hicieron tal observación, y de ellos proviene probablemente la identificación del planeta con una diosa relacionada con la fecundidad, en este caso Ishtar.

     Se decía que Eósforo/Héspero fue padre de Ceix​ y de Dedalión.​ En algunas fuentes también se dice que fue padre de las Hespérides.

     Héspero fue el primero en subir a la cumbre del monte Atlas para observar las estrellas. En ese momento un fenómeno meteorológico aparece, y se lo lleva sin dejar rastro algunos. Fue en ese momento cuando pasa a ser un astro, que es quien trae el atardecer y el descanso de la noche.