martes, 24 de enero de 2017

SIBILA

SIBILA DE DELFOS. John Collier
1891
     Las Sibilas eran vírgenes inspiradas que predecían lo futuro y pronunciaban oráculos. Se trata de una profetisa, las más famosas de la antigüedad, inspirada en ocasiones por Apolo, siendo pues capaz de conocer el futuro. Las Sibilas tenían su vivienda en las grutas o cerca de corrientes de agua. Las profecías eran manifestadas siempre en estado de trance y expresadas en hexámetros griegos que se transmitían por escrito.

     Hubo una joven hija del troyano Dárdano y de Neso (hija del gobernador Teucro) que estaba dotada del don de la profecía y tenía una gran reputación como adivina. Esta joven se llamaba Sibila y por eso desde entonces vienen llamándose así a todas las mujeres que ejercieron esa capacidad de profetizar.

     La más importante de todas en la mitología romana era la Sibila Cumana. Otras tradiciones afirman que su padre fue Zeus, fruto de su relación con una hija de Poseidón llamada Lamia, por lo que su don es de origen divino. También hay tradiciones que citan a Herófila, quien profetizó la guerra de Troya, como hija de Zeus.

    Las más conocidas son, las cinco Sibilas pintadas por Miguel Ángel, llamadas Cuma, Délfica, Eritrea, Persea y Líbica. Pero una lista realizada por Varrón recogida en una obra de Lactancio, llega hasta diez:
     -Sibila de Samos.
    -Sibila Eritrea: Se dice de ella que fue la que predijo que Troya sería destruida en la guerra de Troya y que Homero haría un poema sobre esta guerra lleno de falsedades
     -Sibila del Helesponto.
     -Sibila Frigia.
     -Sibila Cimeria.
     -Sibila Délfica: Parece ser anterior a la de Cuma y su fama fue reconocida cuando la localidad de Delfos se convirtió en la famosa Ciudad Sacerdotal, sede de los célebres Oráculos. Su actuación fue muy popular y tuvo una enorme importancia durante todo el periodo helénico. Sus orígenes son similares a los de Cuma. 
    -Sibila de Cuma: Ella cogió un puñado de arena en su mano y pidió vivir tantos años como partículas de tierra había cogido; pero se le olvidó pedir la eterna juventud, así es que con los años empezó a consumirse tanto que tuvieron que encerrarla en una jaula que colgaron del templo de Apolo en Cumas. La leyenda dice que vivió nueve vidas humanas de 110 años cada una; En una ocasión guió por el Hades a Eneas, príncipe troyano, para que visitara a su padre Anquises; En otra ocasión, se presentó ante el rey romano Tarquinio el Soberbio como una mujer muy anciana y le ofreció nueve libros proféticos a un precio extremadamente alto. Tarquino se negó pensando en conseguirlos más baratos y entonces la sibila destruyó tres de los libros. A continuación le ofreció los seis restantes al mismo precio que al principio; Tarquinio se negó de nuevo y ella destruyó otros tres. Ante el temor de que desaparecieran todos, el rey aceptó comprar los tres últimos pero pagó por ellos el precio que la sibila había pedido por los nueve. Estos tres libros fueron guardados en el templo de Júpiter y eran consultados en situaciones muy especiales.
     -Sibila Libia: Serapión dice en sus versos épicos que la sibila no dejó de profetizar tras su muerte, y que dejó en el aire palabras propias del oráculo, presagios y augurios y que su cuerpo se fue transformando en tierra donde crecía la hierba y que cualquier bestia que la comiese tenía la capacidad de mostrar a los hombres un preciso conocimiento del futuro cuando eran sacrificadas y se analizaban sus entrañas. También piensa que la cara que se ve en la luna es su alma.
     -Sibila Tiburtina.
     -Sibila Babilónica o Pérsica.

Fuentes: Wikipedia
                 http://antesdelogos.blogspot.com.es/  
          https://www.ecured.cu/