martes, 21 de febrero de 2017

APOLO

     Apolo era hijo de Zeus y Leto, y hermano mellizo de Artemisa, después de Zeus fue el dios más influyente y venerado de todos los de la Antigüedad clásica. No tenía equivalente directo en la mitología romana, aunque los poetas posteriores aludieron frecuentemente a él como Febo.

     Era descrito como el dios de la divina distancia, que amenazaba o protegía desde lo alto de los cielos, siendo identificado con la luz de la verdad. Hacía a los hombres conscientes de sus pecados y era el agente de su purificación; presidía las leyes de la religión y las constituciones de las ciudades, era símbolo de inspiración profética y artística, siendo el patrono del oráculo de Delfos, y líder de las musas. Era temido por los otros dioses. 

     Era el dios de la muerte súbita, de las plagas y enfermedades, pero también el dios de la curación y de la protección contra las fuerzas malignas. Además, era el dios de la belleza, de la perfección, de la armonía, del equilibrio y de la razón, el iniciador de los jóvenes en el mundo de los adultos, estaba conectado a la naturaleza, a las hierbas y a los rebaños, y era protector de los pastores, marineros y arqueros. Aunque tuvo muchos amores, también fue infeliz en ese terreno, pero tuvo varios hijos. Fue representado como un hombre joven, desnudo y sin barba, en la plenitud de su vigor, a veces con un manto, un arco y un carcaj de flechas, o una lira, creada para él por Hermes, y con algunos de sus animales como la serpiente, el cuervo o el grifo.

     Como jefe de las Musas, actuaba como dios patrón de la música y la poesía. Su lira se convirtió en un atributo común de Apolo.

     Cuando Hera descubrió que Leto estaba embarazada de Zeus, prohibió que diera a luz en tierra firme, o el continente, o cualquier isla del mar. En su deambular, Leto encontró la recién creada isla flotante Delos, y dio a luz allí. La isla estaba rodeada de cisnes. Después, Zeus aseguró Delos al fondo del océano. Más tarde esta isla fue consagrada a Apolo.

     Otra versión dice que Hera secuestró a Ilitía, la diosa de los partos, para evitar que Leto diese a luz. Los demás dioses engañaron a Hera para que la dejase ir ofreciéndole un collar de ámbar de ocho metros de largo. Primero nació Artemisa y esta ayudó a nacer a Apolo, o Artemisa nació un día antes que Apolo, en la isla de Ortigia, y que ayudó a Leto a cruzar el mar hasta Delos el día siguiente para dar a luz a Apolo. 
     Hera envió a la serpiente para perseguir y matar a Leto por todo el mundo. Para proteger a su madre, Apolo suplicó a Hefesto un arco y flecha. Tras recibirlos, Apolo arrinconó a Pitón en la cueva sagrada de Delfos. Apolo mató a Pitón pero fue castigado por ello, ya que Pitón era un hijo de Gea.

     Hera envió entonces al gigante Ticio a matar a Leto. Esta vez Apolo fue ayudado por su hermana Artemisa en la protección de su madre. Durante la batalla Zeus cedió finalmente su ayuda y arrojó a Ticio al Tártaro. Allí fue sujetado al suelo de roca, cubriendo nueve acres, y una pareja de buitres le comían el hígado diariamente.

     Cuando Zeus abatió al hijo de Apolo, Asclepio, con un rayo por resucitar a Hipólito, Apolo mató en venganza a los Cíclopes, que habían creado el rayo de Zeus. Apolo debía haber sido desterrado al Tártaro para siempre, pero fue en su lugar condenado a un año de trabajo forzado, gracias a la intercesión de su madre, Leto. Durante este tiempo trabajó como pastor para el rey Admeto de Feres en Tesalia.

     Apolo ayudó a Admeto (como agradecimiento) a ganar a Alcestis, la hija del rey Pelias y más tarde convenció a las Moiras para que permitiesen a Admeto vivir más tiempo si algún otro ocupaba su lugar. Pero cuando llegó la hora de su muerte, sus padres, que él había asumido que estarían dispuestos a morir gustosamente en su lugar, rehusaron cooperar. En cambio, Alcestis tomó su lugar, pero Heracles consiguió «persuadir» a Tánatos, para que la devolviera al mundo de los vivos.

     Fue el dios griego que tuvo las relaciones homosexuales más prominentes. Esto podía esperarse del que era dios de la palestra, el lugar donde los jóvenes se reunían para practicar atletismo, siempre desnudos. Los más destacados eran Cipariso y Jacinto. Aunque, también tuvo muchas consortes, con su correspondiente descendencia:
     -Acanta.
     -Arsínoe, con la que tuvo a Asclepio y Eriopis.
     -Casandra.
     -Calíope, sus hijos fueron Lino, Orfeo y Ialemo.
     -Cirene, tuvo a Aristeo.
     -Coronis, madre de Asclepio.
     -Dafne.
     -Dríope, tuvo a Anfiso.
     -Etusa, madre de Eleuter.
     -Hécuba, madre de Troilo y Políxena.
     -Leucótoe.
     -Manto, tuvo a Mopso.
     -Psámate.
     -Quíone, Filamón.
     -Reo, tuvo a Anio.
     -Sinope, tuvo a Sirio (según algunas fuentes, perro de caza de Orión).
     -Terpsícore, tuvo a Lino (depende de la fuente).
     -Urania, madre de Lino (depende de la fuente).
     -Calipso.
     -Madres desconocidas: Cicno, Ciniras y Femónoe.

     Ahora os dejo unos enlaces, por si quereís echarles un ojo:
            -http://mitosyleyendascr.com/
            -http://portalmitologia.com/
            -http://www.elolimpo.com/

Fuente: Wikipedia