miércoles, 16 de agosto de 2017

FAUNO

     En la mitología romana, Fauno era una de las divinidades más populares y antiguas; identificado con el griego Pan debido a la similitud de sus atributos.

     Fauno aparece como el tercero de los reyes del Lacio, hijo de Pico, nieto de Saturno, y padre de Latino con la ninfa Marica. Fauno había promovido la agricultura y la cría de ganado entre sus súbditos, y también se distinguió como cazador.​ Igualmente, se creía que en su reinado el arcadio Evandro y Heracles llegaron al Lacio.
     También era considerado uno de los grandes fundadores de la religión del país, por lo que Lactancio le sitúa a la altura de Numa Pompilio. Tras su muerte fue elevado a la posición de deidad tutelar del país.

     Existe la tradición de que Numa, obligó a Pico y a su hijo Fauno a revelarle el secreto de invocar el relámpago desde el cielo y de purificar las cosas golpeándolas con el rayo.

     Fauno fue adorado como el dios de los campos y los pastores, y como una divinidad oracular y profética. Como deidad rústica, era un espíritu bueno del bosque, las llanuras y los campos.

     Como dios profético, llamado por el nombre de Fatuo, se creía que revelaba el futuro al hombre parte en sueños y parte mediante voces de origen desconocido.​ Lo que era Fauno a este respecto al sexo masculino, su esposa Fauna era al femenino.​ Se decía que daban sus oráculos en verso saturnio, de lo que quizá pueda inferirse que existieron en el Lacio colecciones de oráculos en esta métrica.​ 

     Debido a la forma en que daba sus oráculos, se consideraba a Fauno el autor de apariciones espectrales y sonido terroríficos;​ y por tanto se le describía como un dios lascivo y voluptuoso, que moraba en los bosques y era aficionado a las ninfas.
Fuente: Wikipedia