Rapto de las Sabinas por Pietro da Cortona |
Según la leyenda, mientras Roma era asediada por el rey sabino Tito Tacio, Tarpeya, hija del comandante de la ciudadela, Espurio Tarpeyo, se acercó al campo sabino y les ofreció la entrada a cambio de "lo que ellos llevaban en sus brazos izquierdos".
Deseando el oro, ella se refería a sus brazaletes, pero en lugar de ello los sabinos le lanzaron los escudos (que se llevaban en el brazo izquierdo) sobre ella y así quedó aplastada hasta la muerte debajo de tal peso. Su cuerpo fue entonces lanzado desde la roca Tarpeya, que pasó a ser conocida como el lugar de ejecución para los más destacados traidores de Roma. Los sabinos fueron, sin embargo, incapaces de conquistar el foro (la zona central de la ciudad), con sus puertas milagrosamente protegidas por chorros de agua creados por Jano.
La leyenda fue representada en un denario de plata del emperador Augusto aproximadamente en el año 20 a. C.
Fuente: Wikipedia