The Danaids in Hell, Nicolas Bertin |
Según cuenta la leyenda, Poseidón, tuvo con la ninfa Libia dos hijos: Agenor, quien se trasladó a Siria, y Belo, que vivió en el país del
Nilo. Belo se unió a
Anquínoe, hija del dios Nilo, y con ella tuvo a dos hijos gemelos, a
quienes llamó Dánao y Egipto.
Egipto recibió el reino de Arabia y
Dánao el de Libia. Sin embargo, Egipto reclamó el fértil valle del Nilo y
le dió a este país su propio nombre. Egipto tuvo cincuenta hijos de
diversas mujeres, mientras que Dánao tuvo cincuenta hijas, que fueron
llamadas las Danaides.
Hubo fuertes disputas entre los dos hermanos, hasta el extremo en que, Dánao, aconsejado por Atenea, huyó junto con sus hijas a Argos, en un barco de cincuenta remos, donde, como muestra de agradecimiento, las danaides
edificarían un templo en su honor.
Cuando Dánao se convirtió en rey de Argos, la región padeció una enorme sequía. Las danaides fueron enviadas a buscar agua, y una de ellas, Amimone, estuvo a punto de ser violada por un sátiro. Poseidón escuchó sus gritos de auxilio, y lanzó su
tridente contra el agresor. Pero este esquivó el arma, y finalmente el
tridente se clavaría en una roca cercana, de la que comenzaron a manar
tres torrentes de agua. Esta fuente sería la que salvaría a Argos de la sequía.
Dánao comenzó a despertar temor en
su hermano Egipto. Por ello,
envió a sus cincuenta hijos para que permitieran la
reconciliación con Dánao y se casaran con sus cincuenta primas, sellando
así la paz entre hermanos. Sin embargo, Dánao encargó a sus cincuenta
hijas la misión de llevar una daga la noche de bodas y asesinar a sus
respectivos esposos. Después de su muerte, las danaides fueron
condenadas a rellenar eternamente un barril sin fondo en el Inframundo.
Esta condena ha sido utilizada como símbolo del dilema entre la
obligación de obedecer los deseos del padre, y la prohibición de matar. De hecho, según el mito, Zeus
había absuelto en vida a las cuarenta y nueve hermanas, y había
ordenado castigar a Hipermnestra por desobediencia. Sin embargo, en el Averno, las tornas cambiarían, y el juicio daría como resultado la absolución de la desobediente, y la condena de las asesinas.
Hipermnestra, la mayor de las danaides, no llegó a ejecutar a su esposo, Linceo,
como muestra de gratitud por haberla respetado durante toda la noche.
Por ello, sería sometida a juicio, y finalmente liberada por Afrodita, quien había sido conmovida por los enamorados.
Dánao, después de ese suceso, tuvo problemas para encontrar pretendientes para sus hijas, por ello celebró unos juegos en los que ofrecía como recompensa la
mano de cada una de las cuarenta y nueve hijas. Además, liberaba a los futuros maridos de la carga de
hacerle regalos por convertirse en su suegro casándose con sus hijas.
Los nuevos maridos de las danaides pasarían a llamarse dánaos, y su descendencia constituiría el pueblo de los dánaos, que habitarían en la región de Argos.
Algunas versiones cuentan que, Linceo,
buscó venganza por sus hermanos muertos. Así, según unos, asesinó al
propio Dánao, mientras que según otros, además de a su suegro, mató a
las cuarenta y nueve danaides.
También se dice que Linceo consiguió el trono de Argos, bien a
través de la vía violenta antes descrita, bien mediante la
reconciliación con Dánao, el cual le cedió pacíficamente su trono.
Fuente: Wikipedia, http://mitosyleyendascr.com/