Sigurd o Siegfried (Sigfrido) es un héroe de la literatura y mitología germánica, hijo de Sigmund, rey de los francos, y de Hjördis, hija de Eylimi, que nació en un bosque y murió durante el parto.
Sigfrido creció en la selva y luego tuvo como maestro al herrero Regin, que le aconsejó cómo debía matar a Fafner, el dragón custodio del tesoro de los nibelungos en el Brezal de Gnita. El futuro héroe forjó nuevamente la espada que había pertenecido a su padre (Nothung o Balmung),
y con ella atravesó el corazón del monstruo, en cuya sangre se bañó
para hacerse invulnerable. Sólo un lugar de su espalda no fue bañado por la sangre.
Hay un paralelismo con Aquiles de la mitología griega, que se hizo invulnerable bañándose en la laguna Estigia, y sólo en el talón era mortal.
Se casó con Krimilda, y logró para el hermano de ésta, Gunther, la mano de valquiria Brunilda. Sigfrido tomó la apariencia de Gunther
y superó ciertas pruebas que sólo el héroe podía superar. Brunilda
desde entonces consideró superior a su marido, hasta que Krimilda le contó los verdaderos hechos. Desde entonces, Brunilda preparó la
venganza, que ejecutó Gutorm, hermano de Gunther.
Dicha venganza consistía en revelar al ejecutor el lugar exacto donde
la piel del héroe no estaba protegida por la sangre del dragón. El asesino asestó un lanzazo que acabó con la
vida de Sigfrido. Brunilda se suicidó al día siguiente, pues pese a todo
amaba a Sigfrido. Krimilda fue desposada luego por Etzel, que quiso
hacerse dueño del tesoro de los nibelungos, que Gunther había hecho esconder en el fondo del río Rin. Krimilda invitó a sus hermanos, y durante el banquete en la corte del rey Etzel
(Atila), los hombres de Gunther fueron asesinados, consiguiendo que su
propio pueblo fuera eliminado a traición. Más tarde, Krimilda embriagó y
mató al mismo Etzel, arrojándose finalmente a las llamas del palacio,
cuyo incendio ella misma había provocado.
Fuente: Wikipedia