En la mitología griega Tiro era la hija de Salmoneo (hijo de Eolo, hermano de Atamante y Sísifo) y su mujer Alcídice. Era esposa de Creteo (hermano de Salmoneo y por tanto su tío) con quien tuvo a Esón (el padre de Jasón), Feres y Amitaón. Con Poseidón tuvo a los gemelos Pelias y Neleo.
Según unas versiones, la boda de Tiro con Creteo es posterior a que
diera a luz a Pelias y Neleo, pero según otras Tiro ya estaba casada con
Creteo cuando se le unió Poseidón. Según Hesiodo, Tiro se peleó con Salmoneo y fue rescatada por Zeus, quien la condujo a la casa de su tío Creteo para que la educara. Por su matrimonio con Creteo, Tiro era reina de Yolco.
Tiro amaba a Enipeo, un dios fluvial de Tesalia, amor que no era correspondido. El dios Poseidón
tomó la forma de Enipeo, y se unió a ella en las fuentes del propio
río, formando una ola descomunal. De esta unión nacieron los gemelos Pelias y Neleo, a quienes Tiro debía cuidar por órdenes de Poseidón. Según otra versión, Tiro sin embargo, abandonó a
los niños en una montaña, donde fueron criados por un pastor como si
fueran sus propios hijos. Cuando fueron adultos, Pelias y Neleo fueron
en busca de su madre y mataron a la madrastra de ésta, Sidero, por haberla maltratado. Sidero se escondía en un templo de Hera pero Pelias la mató de todas formas, granjeándose el eterno odio de la diosa Hera. Homero cuenta que ambos hermanos fueron grandes servidores de Zeus.
A la muerte de Creteo, Tiro se casó con el hermano de aquél, Sísifo,
con quien tuvo dos hijos a los que mató para evitar que se cumpliera el
oráculo que había predicho que los hijos de Sísifo matarían a su padre.
Fuente: Wikipedia