En la mitología griega, Fineo era el rey de Tracia, con el don de la adivinación. Su primera mujer fue Cleopatra, hija de Bóreas, y cuando ella murió, con Ida, la cual estaba celosa de los hijos de Cleopatra, los acusó falsamente de haber intentado violarla. Fineo, creyendo a su esposa, cegó a sus hijos.
Según la leyenda, Fineo obtuvo su don de la adivinación a cambio de la capacidad de ver, quedando ciego. Una versión, fue cegado por los Boréadas (los mellizos alados Calais y Zetes), como castigo por haber cegado a sus hijos. Otra, que fue cegado por Poseidón, por haber mostrado a los hijos de Frixo, el camino de vuelta a Gracia desde Cólquide.
Otra leyenda dice que Zeus, furioso con él por haber revelado sin consentimiento secretos de los dioses del Olimpo, le castigó confinándolo en una isla con un festín del que no podía comer nada, pues las Harpías siempre robaban la comida de sus manos justo antes de que pudiera tomarla. Este castigo se prolongó hasta la llegada de Jasón y los Argonautas, que enviaron tras las Harpías a los Boréadas. Estos lograron espantarlas, pero no las mataron a petición de Iris, quien prometió que Fineo no volvería a ser molestado. Agradecido por su ayuda, Fineo contó a los Argonautas cómo superar las Simplégades para continuar su viaje, hacer pasar primero una paloma por las Simplégades: si pasaba la paloma, el barco también lo haría.
Fuentes: Wikipedia, http://www.kelpienet.net/