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miércoles, 21 de octubre de 2020

TIDEO

     En la mitología griega, Tideo es un héroe en la leyenda de los siete contra Tebas. Hijo de Eneo y Peribea, procedente de Etolia, había sido desterrado de Calidón tras la denuncia de Agrio por haber matado a un hermano del rey Eneo, a sus sobrinos o a su propio hermano.

     En su destierro llegó a Argos, donde tuvo una disputa con Polinices.

     El rey de Argos, Adrasto, había recibido a un oráculo que decía que tenía que casar a sus hijas con un león y un jabalí, así que tras enterarse de la disputa, interpretó que Tideo y Polinices eran el león y el jabalí (debido a que llevaban esos animales grabados en sus escudos o que la disputa había sido por la posesión de dos pieles de estos animales).

     Así que Adrasto detuvo la disputa, casó a sus hijas con ellos y prometió a Tideo luchar para conseguir para él el trono de Calidón, si bien antes debía prestar su ayuda para que Polinices recuperara el trono de Tebas.

     Reunido el ejército, Tideo fue uno de los siete jefes y fue enviado como embajador ante Eteocles, que reinaba en Tebas, para reclamar los derechos de Polinices. Eteocles se negó y Tideo desafió a los tebanos, a quienes venció en combates individuales. Luego cuando regresaba a Argos fue sorprendido en una emboscada por cincuenta hombres, pero Tideo los mató a todos excepto a Meón.

     Después el ejército de Argos sitió Tebas, pero fracasó en su intento de conquistarla. Tideo atacó la puerta Crenide (o la puerta Preto según Esquilo) pero fue herido de muerte por Melanipo. El propio Tideo, o Anfiarao, que era adivino y otro de los siete capitanes, mató a Melanipo. El adivino dio su cabeza a Tideo, que estaba moribundo, y éste, sorbió sus sesos. Esto lo hizo Anfiarao para atraer sobre Tideo, a quien odiaba, la cólera de Atenea, y así pues la diosa no prestó ayuda a Tideo y lo dejó morir.

     Tideo tuvo con Deípile a Diomedes, que llegaría a ser rey de Argos y una hija llamada Cometo.

Fuente: Wikipedia

lunes, 12 de octubre de 2020

ÁNTIFO

     En la mitología griega, Ántifo, era el nombre de varios personajes:

          1-ÁNTIFO: príncipe troyano, uno de los hijos de Hécuba y de Príamo. Según en la Ilíada, murió poco después que su hermano Isos, muertos ambos a manos de Agamenón. Homero cuenta una anécdota sobre lo sucedido a Ántifo y su hermano, mientras guardaban los rebaños de ovejas en el monte Ida. Aquiles les sorprendió y los ató. Los liberó tras el pago de un rescate. Cuando murieron compartían el mismo carro de guerra, sosteniendo las riendas Isos. Ántifo murió de un espadazo propinado por el atrida en la oreja, e Isos de un lanzazo justo por encima del pecho. Según Higino, el asesino de Ántifo fue Sarpedón.

          2-ÁNTIFO: hijo de Mirmidón y Pisídice, hija de Eolo.

          3-ÁNTIFO: hijo de Heracles y Laótoe, una de las muchas hijas de Tespio.

          4-ÁNTIFO: líder de los meonios en la Guerra de Troya. Era hijo de Talémenes y una ninfa del lago Gigeo, y hermano de Mestles.

          5-ÁNTIFO: jefe aqueo, hijo de Tétalo y Calcíope, era oriundo de Nísiro que, como Cos, es una de las islas Espóradas, en la costa suroeste de Asia Menor. Tras la guerra conquistó la región que llamó Tesalia.

          6-ÁNTIFO: guerrero aqueo, hijo de Egipto y originario de Ítaca. Sobrevivió a la Guerra de Troya, pero en el viaje de vuelta a casa fue devorado por el cíclope Polifemo.

          7-ÁNTIFO: viejo amigo de la casa de Odiseo.

          8-ÁNTIFO: aqueo al que mató Eurípilo.

          9-ÁNTIFO: uno de los defensores de Tebas contra los siete. Le mataron Anfiarao y Apolo.

Fuente: Wikipedia

domingo, 4 de octubre de 2020

IFIS

     En la mitología griega, existen varios personajes con el nombre de Ifis:

          1-IFIS: hijo de Aléctor, fue uno de los reyes de Argos. Polinices le aconsejó sobre cómo convencer a Anfiarao para participar en la expedición de Los Siete contra Tebas. Le aconsejó entregar a Erífile el collar de Harmonía, la esposa de Anfiarao. Fue padre de Eteoclo y Evadne, mujer de Capaneo.​ Dejó el reino a su nieto Esténelo, el hijo de su yerno Capaneo.

          2-IFIS: compañera íntima de Patroclo, que le fue presentada por Aquiles

          3-IFIS: hija de Ligdo y Teletusa que fue salvada de la muerte por su madre y una nodriza, que mintieron diciendo que era niño (pues Ligdo creía que la Fortuna no le permitía tener una hija y había ordenado su ejecución si nacía de ese sexo) por instigación de la diosa Isis. Cuando creció, Ligdo la comprometió con una muchacha de su misma edad llamada Yante: las dos se enamoraron instantáneamente, pero Ifis pensaba que nunca podría ser feliz con Yante, ya que eran del mismo sexo. Teletusa le pidió ayuda a Isis, ésta transformó a la joven en muchacho, y así pudo casarse con Yante.

          4-IFIS: un joven de Chipre que se enamoró de la princesa Anaxáreta, hija de Teucro y se suicidó frente a su casa clamando venganza a los dioses, pues ella no le había correspondido.

          5-IFIS: uno de los Argonautas, hijo de Esteneleo y hermano de Euristeo, de Argos. Fue muerto en combate por Eetes en la Cólquide.

          6-IFIS: una de las hijas de Tespio y Megamedes. Dio un hijo a Heracles, Celeustanor.

          7-IFIS: un guerrero tebano, defensor contra los Los siete contra Tebas. Fue muerto por Acamas.

          8-IFIS: hija de Peneo y madre de Salmoneo, tenido con Eolo, el hijo de Helén.

Fuente: Wikipedia

lunes, 24 de agosto de 2020

PARTENOPEO

     En la mitología griega, Partenopeo, era hijo de la cazadora Atalanta, que participó a su vez en la cacería del jabalí de Calidón. Algunas fuentes, citan como padre al dios Ares.

     Participó en la expedición de los siete contra Tebas, en la que fueron derrotados por los tebanos con la ayuda de Zeus, quien lo fulminó con un rayo, para castigar su insolencia por portar un escudo con una antorcha, que representaba el destino al que pensaba someter a Tebas.

Fuente: Wikipedia

domingo, 23 de agosto de 2020

ERÍFILE

     En la mitología griega, Erífile era hija de Tálao y hermana de Adrasto, fue la esposa de Anfiarao de Argos y la madre de Alcmeón. Erífile persuadió a Anfiarao para participar en el asalto de los siete contra Tebas, aunque sabía que moriría. Había sido convencida por Polinices, quien le ofreció el collar de Harmonía a cambio de su ayuda.

     Moribundo, Anfiarao encargó a sus hijos Alcmeón y Anfíloco que vengasen su muerte, y tras su fallecimiento, cumpliendo la profecía, Alcmeón mató a su madre. Fue perseguido por las Erinias mientras huía por toda Grecia, llegando finalmente a la corte del rey Fegeo, quien le dio a su hija en matrimonio. Exhausto, Alcmeón pidió un oráculo sobre cómo apaciguar a las Erinias, y le dijeron que tenía que pararse donde el sol no brillaba cuando mató a su madre. Este lugar era la desembocadura del río Aqueloo, que se había encenagado. Aqueloo, el dios de ese río, le ofreció a su hija Calírroe en matrimonio si recuperaba el collar y las ropas que Erífile llevaba cuando persuadió a Anfiarao de que tomase parte en la batalla. Alcmeón le había dado estas joyas a Fegeo, quien hizo que sus hijos matasen a Alcmeón cuando descubrió su plan.

     Erífile aparece en el Hades en la Eneida de Virgilio, llevando aún las heridas infligidas por su hijo. También juega un papel en la Tebaida de Estacio, donde su deseo de conseguir el collar de Harmonía es uno de los catalizadores de la guerra entre Argos y Tebas. Sin embargo, en esta versión del mito Argía, la esposa de Polinices, convence a su marido para darle el collar a Erífile, de forma que Anfiarao se una a la guerra.

     El collar de Erífile fue un regalo de Cadmo: Zeus le dio como esposa a Harmonía, hija de Afrodita y Ares. Y todos los dioses abandonaron el cielo, y festejaron en Cadmea la celebración del matrimonio con himnos. Cadmo le dio una túnica y el collar fabricado por Hefesto, que algunos dicen le había dado a Cadmo el propio Hefesto, si bien Ferécides dice que le fue dado por Europa, que lo había recibido de Zeus.

     Se exponía una reliquia en Chipre en la época de Pausanias (siglo II): En Chipre está la ciudad de Amato, en la que hay un antiguo santuario de Adonis y Afrodita. Aquí dicen que está dedicado un collar dado originalmente a Harmonía, pero llamado el collar de Erífile, porque fue el soborno que aceptó para traicionar a su marido. Fue dedicado en Delfos por los hijos de Fegeo, pero fue llevado de allí por tiranos de Fócida.

     El collar que vio Pausanias era de piedras verdes con oro, lo que le hizo dudar de que fuera aquel del que se habla en la Odisea, pues en otros pasajes de la misma obra en los que se habla de collares como ese se hace mención de las piedras.

Fuente: Wikipedia

domingo, 19 de abril de 2020

OFELTES

     En la mitología griega, Ofeltes, es el nombre de varios personajes:

          1-OFELTES: era el hijo del rey de Nemea Licurgo y de la reina Eurídice. Al nacer Ofeltes, su padre consultó al oráculo de Delfos cómo asegurar la salud y felicidad de su hijo. La respuesta del oráculo fue que el niño no debía tocar el suelo hasta haber aprendido a andar.

     Un día su niñera Hipsípila, que caminaba con él en brazos, se encontró con el ejército argivo que se dirigía al asedio de Tebas, que le preguntaron por una fuente de agua cercana. Hipsípila dejó a Ofeltes en el suelo y caminó con ellos para mostrarles el lugar de la fuente. Mientras tanto, el niño fue estrangulado por una serpiente. El adivino Anfiarao interpretó correctamente el suceso como un presagio de que la campaña contra Tebas sería un fracaso.

     Tras este incidente los generales celebraron unos juegos en honor de Ofeltes, que fueron el principio de los famosos Juegos Nemeos.

     Ofeltes fue llamado Arquémoro ("precursor de la muerte") de acuerdo con la profecía de Anfiarao.

     Según cuenta Tzetzes, uno de los dos montes de Eubea se llamó Ofeltes en su honor. El otro recibió el nombre de Zarex.

          2-OFELTES: uno de los piratas que intentaron secuestrar a Dioniso y fueron transformados en delfines.

          3-OFELTES: hijo de Peneleo, muerto en la Guerra de Troya, y padre de Damasictón, rey de Tebas.

          4-OFELTES: un guerrero troyano, padre de Niso y Euríalo, que acompañaron a Eneas hasta Italia.

          5-OFELTES: un dolonio muerto por Telamón en la batalla que enfrentó a los dolonios y a los Argonautas.

          6-OFELTES: hijo de Arestor, un soldado del ejército de Dionisos durante su campaña india. Muerto por Deriades.

Fuente: Wikipedia

sábado, 18 de abril de 2020

ÉPITO

Representación de Arcadia, de Friedrich August Von Kaulbach
     En la mitología griega, Épito, es el nombre de varios personajes:

          1-ÉPITO: rey de Azania, uno de los reinos en los que se había dividido la Arcadia, hijo del rey Élato y de Laódice, la hija de Cíniras de Chipre. En la división del reino que hicieron su padre y su tío Azán, Épito recibió un pequeño territorio llamado Faesana, junto al río Alfeo, pero la muerte sin hijos del rey Clítor le convirtió, junto a su hermano Estínfalo, en rey de casi toda Arcadia. Además, una parte del país fue renombrado como Epitis en su honor. Murió mientras cazaba, por la picadura de una serpiente llamada Seps, que dio nombre al lugar donde aquello ocurrió, el monte Sepsa. La tumba de Épito, cerca del monte Cilene, fue famosa en la antigüedad por ser citada por Homero y Pausanias. Aunque había educado como propia a Evadne, la hija de Poseidón, Épito no tuvo descendencia propia, por lo que fue sucedido en el trono por su primo Aleo.

          2-ÉPITO: rey de Arcadia, hijo de Hipótoo, al que sucedió. Fue durante su reinado cuando Orestes, aconsejado por un oráculo, abandonó Micenas y se estableció en Arcadia. Épito fue cegado en castigo por entrar en un santuario prohibido del dios Poseidón en Mantinea, muriendo poco después. Le sucedió en el trono su hijo Cípselo.

          3-ÉPITO: también llamado Telefón, fue un rey de Mesenia. Era el hijo menor del heráclida (descendiente de Heracles) Cresfontes y de Mérope, la hija de Cípselo, rey de Arcadia. Cuando su padre y sus hermanos fueron asesinados durante una insurrección, Épito quedó bajo la protección de su abuelo Cípselo, convirtiéndose en el único superviviente de su familia paterna. Mientras tanto, el trono de Mesenia fue usurpado por otro de los heráclidas, Polifonte, que obligó a Mérope a casarse con él. Cuando Épito se hizo adulto, vengó con la ayuda de su suegro Holcas la muerte de su padre, derrotando a Polifontes y matando a los que habían intervenido en la insurrección. Tomó el reino, y fue sucedido por su hijo Glauco después de un sabio gobierno. Por él se denominó en adelante Epítidas a los reyes de Mesenia, sustituyendo el patronímico más genérico de Heráclidas.

          4-ÉPITO: uno de los defensores de Tebas durante el asedio de la ciudad conocido como el de «los siete contra Tebas».

Fuente: Wikipedia

domingo, 29 de marzo de 2020

FEGEO

     En la mitología griega, hay varios personajes con el nombre de Fegeo:

          1-FEGEO: rey de Fegea o de Psófide (Arcadia), hijo de Alfeo o de Ínaco y Melia, que auxilió a Alcmeón cuando este huía perseguido por las Erinias.

     Arsínoe, la hija de Fegeo, se casó con Alcmeón, pero fue abandonada al poco tiempo y no volvió a ver a su marido hasta que este volvió para recoger el collar y la túnica de Erífile, su madre. Para que Arsíone se lo diera voluntariamente le dijo que sólo donándolo al oráculo de Delfos podría liberarse de las erinias que aún le perseguían, pero realmente lo quería porque su nueva mujer, Calírroe, se lo había pedido como condición para seguir con él. Arsínoe se lo entregó pensando que así volvería a recuperar a su marido, pero un sirviente de Alcmeón reveló a Fegeo todo el engaño. Este ordenó a sus hijos que mataran a Alcmeón cuando saliese del palacio y Arsínoe, que no sabía nada, presenció horrorizada cómo sus hermanos mataban al que ella creía su fiel esposo. Sin dejar que su padre y sus hermanos se explicaran, los maldijo con morir antes de la siguiente luna nueva. Fegeo, intentando rehuir a la maldición, la encerró en un arca y mandó a sus hijos a que se purificasen en el templo de Apolo en Delfos.

     Al enterarse Callírroe de la muerte de Alcmeón, imploró a Zeus que permitiera que sus hijos, que eran todavía unos niños, pudieran vengar la muerte de su padre. El dios se apiadó de ella, e hizo que Acarnán y Anfótero pasaran inmediatamente a la edad adulta. Así, ambos hermanos complacieron el deseo de su madre dando muerte a Fegeo y a sus hijos.

          2-FEGEO: hijo de Dares que participó junto a su hermano Ideo en la guerra de Troya, defendiendo la ciudad frente a los aqueos. Fue muerto por Diomedes.

          3-FEGEO: soldado de Eneas que fue muerto por Turno cuando llegaron a Italia.

          4-FEGEO: compañero de Eneas, que corrió la misma suerte que el anterior.

          5-FEGEO: uno de los tebanos que tendieron una emboscada a Tideo cuando éste volvía de Tebas justo antes de la guerra de los siete contra Tebas. Como el resto de los que participaron en la emboscada, murió a manos de Tideo.

          6-FEGEO: un tebano que luchó en la guerra de los siete contra Tebas. Fue muerto por Agreo.

       7-FEGEO: mensajero ateniense que Teseo envió a Creonte amenazándole con marchar contra él si no dejaba enterrar los cuerpos de los caídos en la citada guerra.

Fuente: Wikipedia

sábado, 21 de marzo de 2020

LOS SIETE CONTRA TEBAS


     En la mitología griega, la historia de Los Siete contra Tebas podría entenderse como la continuación del drama de Edipo, rey de Tebas que, mató a su padre y se casó con su madre, si bien no era consciente de la verdadera identidad de estos. Cuando el adivino Tiresias desveló el secreto, la reina Yocasta (madre y esposa de Edipo a la vez) se ahorcó en su palacio. Edipo, desesperado, cogió un alfiler del vestido de Yocasta y se sacó los ojos con él.

     El hermano de Yocasta, Creonte, tomó las riendas de la ciudad y desterró a Edipo, que se fue huyendo de las Erinias y maldiciendo a sus dos hijos, Eteocles y Polinices, por el trato vejatorio que había recibido de ellos.

     Los hijos (y hermanos) de Edipo decidieron entonces hacerse cargo del trono tebano alternándose cada año uno en el poder. Pero cuando pasó el primer año Eteocles se negó a abdicar en su hermano y lo desterró de la ciudad alegando que no era apto para reinar.

     Entonces Polinices se dedicó a buscar aliados. Irónicamente acudió a Colono para pedir a su padre, Edipo, que le apoyara, pues se decía que un aliado de Edipo siempre saldría vencedor. Sin embargo, Polinices se encontró con una nueva maldición por parte de su padre, que sentenció que sus dos hijos se matarían entre sí y le vaticinó que nunca reinaría.

     Decepcionado, Polinices buscó apoyos en la ciudad de Argos, donde reinaba el rey Adrasto.

    Adrasto, tenía dos hijas llamadas Argía y Deípile que, eran pretendidas por los mejores príncipes de toda Grecia. Esto puso en un dilema a su padre, pues temía que cuando eligiera a los dos maridos de sus hijas, el resto se convertirían en enemigos. Por esto acudió al oráculo de Delfos, que le aconsejó que unciera a su carro al león y al jabalí que luchaban en su palacio. Sin entender el significado de la respuesta, Adrasto se volvió a su ciudad.

     No tardó mucho en descifrar el mensaje del oráculo, pues esa misma noche tuvo que separar a dos de sus ilustres huéspedes, que se habían enfrascado en una dura pelea que empezó al jactarse cada uno de las bondades de su ciudad. Se trataba de Polinices de Tebas y de Tideo de Calidón, que en la lucha portaban cada uno en sus escudos los emblemas de sus ciudades, es decir, el león (símbolo de Tebas) y el jabalí de Calidón. Adrasto casó a Argía con Polinices y a Deípile con Tideo. Sin embargo ambos príncipes estaban desterrados de sus reinos, Polinices por los hechos comentados anteriormente y Tideo por haber matado a su hermano Melanipo, que si bien él argumentó que se había tratado de un accidente de caza, no fue creído por su padre, pues se había profetizado que Melanipo le mataría a él. Para congraciar a sus nuevos yernos y engrandecer su poder en la zona, Adrasto les prometió restaurarles en sus respectivos tronos, siendo así como un conflicto interno de Tebas se convertiría en una guerra entre dos reinos.

Adrasto decidió que primero marcharían sobre Tebas, pues estaba más cerca de Argos y todavía se encontraba revuelta por los incidentes de Edipo y su familia. Todos sus comandantes se mostraron de acuerdo a excepción de Anfiarao, que predijo que todos morirían en el asalto a Tebas menos Adrasto y, por lo tanto, se negaba a participar en la marcha. Adrasto embistió furioso contra Anfiarao, con el que ya arrastraba viejos rencores, y le hubiera matado allí mismo si no hubiera intercedido Erífile, hermana del primero y esposa del segundo, que arrancándoles las espadas de las manos les hizo jurar que siempre acatarían su decisión.

     Entonces Tideo y Polinices, que eran los que más beneficios esperaban de esta guerra, decidieron sobornar a Erífile para que convenciera a su marido de que se uniera a la expedición. Le ofrecieron el collar mágico que Afrodita, había regalado a Harmonía, una antepasada de Polinices. El collar hacía irresistiblemente bella a la mujer que se lo pusiera, por lo que Erífile, que estaba obsesionada por el paso de la edad, aceptó el chantaje y ordenó a su marido y a su hermano que iniciaran la marcha contra Tebas.

      Siete fueron los paladines que encabezaron esta expedición: el rey Adrasto, su cuñado Anfiarao, Hipomedonte, Capaneo, Partenopeo de Arcadia, Polinices de Tebas y Tideo de Calidonia.

     Cuando la expedición llegó a la ciudad de Nemea pidieron al rey Licurgo que les diese de beber. Este ordenó a Hipsípila, la nodriza de su hijo, que les condujera a un manantial. La esclava, que anteriormente había sido una princesa, dejó al niño en el suelo mientras guiaba a los argivos hasta la fuente más cercana, pero cuando volvieron descubrieron que una serpiente había matado al bebé. Anfiarao insistió en que esa era una señal de mal agüero, por lo que Adrasto, intentando ahuyentar este mal presagio, enterró al niño e instauró los juegos Nemeos en su honor, que se celebrarían cada cuatro años y que constaban de siete pruebas (en las que resultaron vencedores cada uno de los jefes de la expedición).

     Cuando los siete se acercaron a Tebas, enviaron a Tideo para que convenciese a Eteocles de que abdicara pacíficamente en su hermano. El hijo de Edipo rechazó esta propuesta, por lo que se dio como oficialmente declarada la guerra que seguiría.

     Tideo desafió uno a uno a todos los tebanos que quisieran luchar contra él. Salió vencedor de todos los combates, por lo que pronto no hubo en Tebas nadie que intentase salvar a la ciudad del desastre. Entonces cada uno de los comandantes de la expedición se apostaron delante de las siete puertas de la ciudad, dando comienzo al asedio.

     Tiresias, consultado por Eteocles, profetizó que los tebanos triunfarían sólo si un príncipe de la casa real se inmolaba en sacrificio a Ares, pues el dios todavía reclamaba una compensación por la muerte de su dragón a manos de Cadmo, el antepasado de los reyes de Tebas. Inmediatamente Creonte se ofreció voluntario para el sacrificio, pero su hijo Meneceo no se lo consintió y se suicidó en la cueva del dragón, calmando así la ira del dios de la guerra.

     La profecía de Tiresias se cumplió: cuando los siete pensaban que tenían la victoria y Capaneo empezó a trepar por las murallas de Tebas, Zeus lo mató con su rayo por haber dicho tras ser rechazado en una puerta, que ni el mismo Zeus la hubiera atravesado. Esta señal divina animó a los tebanos, que salieron de la ciudad y causaron estragos en el ejército argivo, matando, entre otros, a Partenopeo y a Hipomedonte.

     La amenaza que cernía sobre Tideo también se realizó, pues fue herido mortalmente por un tebano que casualmente se llamaba Melanipo, como su hermano. Atenea intercedió a favor de Tideo, por el que sentía predilección, y acudió al campo de batalla con una pócima que le hubiera curado. Pero Anfiarao, que odiaba a Tideo y a Adrasto por haberle obligado a marchar hacia una muerte segura, la vio llegar y, adelantándose, le ofreció a Tideo la cabeza de Melanipo, convenciéndole de que si se comía el cerebro de su asesino se recuperaría de su herida. Tideo siguió sus instrucciones justo cuando llegaba Atenea con la poción mágica, pero cuando la diosa vio esta aberración, vertió el elixir en la tierra y se retiró decepcionada.

     Para evitar más derramamiento de sangre, Polinices propuso que se decidiera la cuestión mediante un combate singular entre él y su hermano. Eteocles aceptó el reto, pero en la lucha que siguió ambos contendientes se atravesaron mutuamente con su espada y murieron uno junto al otro.

     A partir de entonces Creonte capitaneó el ejército tebano hasta la victoria. Los argivos se retiraron, Adrasto huyó a lomos del caballo alado Arión y Anfiarao hubiera muerto si Zeus no hubiera abierto con un rayo la tierra a su paso justo cuando iba a ser atravesado por la espada de un enemigo. Desde entonces se cuenta que Anfiarao y su auriga Batón son los únicos vivos que habitan en el mundo de los muertos.


     Terminada la guerra, Creonte se proclamó rey de Tebas y declaró traidores a Polinices y a sus seguidores, prohibiendo, bajo pena de muerte, el darles sepultura. Pero su sobrina Antígona salió de noche para incinerar a su hermano. Creonte la sorprendió y, viendo también una buena oportunidad para librarse de una enemiga potencial, la condenó a ser enterrada viva en la tumba de Polinices. Encargó a su hijo Hemón esta tarea, pero el joven, que era amante de Antígona, primero le suplicó piedad y después, al no conseguirla, huyó con su amada, se refugiaron entre unos pastores y tuvieron un hijo al que llamaron Meón.

     Mientras tanto, Adrasto había ido a Atenas para suplicar al rey Teseo que intercediera ante la crueldad de que los cadáveres de sus héroes no pudieran ser recogidos y honrados por sus familiares. El ejército reunido por Teseo derrotó al ejército tebano y dio los cuerpos de los argivos a sus familias para que recibieran la debida sepultura.

     Como culmen a la tragedia, Evadne, la esposa de Capaneo, no quiso separarse de su marido ni en la muerte y se arrojó viva a la pira funeraria.

     Otra versión afirma que Tiresias hizo ver a Creonte que los dioses no estaban de acuerdo con su actitud, y le convenció de que sepultara a los vencidos. Pero cuando el rey, de mala gana, se disponía a enterrar a los argivos y a liberar a Antígona, esta se había ahorcado para evitar ser enterrada viva. Hemón esperó a su padre en la tumba de Polinices y le asesinó cuando este acudía a cumplir la palabra dada a Tiresias. Después el joven se suicidó a los pies del cuerpo de Antígona con la misma espada con la que había matado a su padre. Eurídice (no es la mencionada en el mito de Orfeo sino una hija de Anfiarao y Erifile), la esposa de Creonte y madre de Hemón, también se suicidó al conocer la muerte de ambos.

     La marcha de los siete contra Tebas fue definida y considerada como la primera de las grandes guerras en Grecia, pues hasta entonces todas habían tenido como contendientes a países vecinos. Por esto destacó la marcha del ejército argivo desde el Peloponeso hasta Beocia, y su búsqueda de aliados en países como Arcadia o Mesenia. También los tebanos solicitaron ayuda de lugares tan lejanos como Fócide. Aunque la escena se repetiría en otras guerras como la de Troya, esta expedición también fue novedosa por la forma en que se desarrolló: un ejército derrotado en campo abierto se refugia en sus fortificaciones y otro ejército inexperto en asedios sufre las bajas provocadas por los proyectiles lanzados desde la ciudad y es finalmente derrotado cuando el contrario observa su debilidad y sale de su refugio.

     La victoria sobre los siete no supuso, el fin de los problemas en Tebas. Diez años después, los hijos de los paladines argivos muertos en la contienda planearon su venganza en la expedición que se conoce como de los epígonos, de la que salieron vencedores.

Fuente: Wikipedia

lunes, 6 de enero de 2020

EGIALEO

     En la mitología griega, existen varios personajes con el nombre de Egialeo:

          1-EGIALEO: príncipe de la Cólquida (actual Georgia) hijo del rey Eetes y de la ninfa Asterodea.

     Cuando Medea huyó con Jasón llevándose el vellocino de oro, Eetes ordenó a su hijo que los persiguiera y los trajera de vuelta. Apsirto les dio alcance en la desembocadura del Danubio, pero para evitar muertes innecesarias acordó una tregua con los argonautas que dejaba al arbitrio de un rey del lugar la decisión de si Medea debía regresar con su padre y devolver el vellocino o podía continuar con Jasón. Pero viendo Medea que sus aspiraciones podían venirse abajo, mandó un mensaje a su hermanastro diciéndole que realmente estaba secuestrada por los argonautas, y que iría gustosa de vuelta con él si la recogía esa noche en un bosque apartado. El ingenuo príncipe cayó en la trampa y fue asesinado por Jasón, que lo esperaba en el lugar indicado por Medea, la orilla de un río que desde entonces lleva el nombre de Apsirto. Para no ser acusado de traición, Jasón arguyó que Apsirto había roto la tregua en el momento en que había desembarcado y había acudido a ese lugar.

     Otra versión dice que Apsirto era todavía un niño cuando Medea le convenció de que huyera con él y los argonautas. Pero cuando vio que la armada de Eetes les iba a dar alcance, le asesinó, cortó su cadáver en pedazos y los fue tirando esparcidos por el mar. El rey Eetes, horrorizado, se entretuvo recogiendo uno por uno los restos de su hijo, lo que dio tiempo a la expedición para poder huir.

     Medea, bien por los remordimientos o bien porque el mástil oracular de la nave Argo se había negado a transportarla hasta que no fuera purificada, acudió a su tía, la maga Circe, para que los absolviera del horrendo crimen, para lo que se presentaron de incógnito y no le desvelaron el nombre de la víctima. Una vez hechas las expiaciones y ceremonias necesarias Circe se dio cuenta de la verdadera historia, y expulsó de su corte a Jasón y a Medea, que volvieron con los argonautas, que los estaban esperando.

     Estrabón afirma que la muerte de Apsirto ocurrió bastante después, cuando la expedición se encontraba en unas islas del mar Adriático que en su honor recibieron el nombre de Apsírtidas. Algunos autores afirman que el joven se llamaba Egialeo, y que Apsirto (que significa arrojado) fue el sobrenombre que se le puso después de su muerte.

          2-EGIALEO: es el fundador y primer rey de Sición. Es el hijo mayor de los oceánidas Ínaco y Melia, hermano de Foroneo.

          3-EGIALEO: hijo mayor de Adrasto, rey de Argos y de Anfitea o Demonasa.​ Egialeo fue identificado como uno de los Epígonos, que vengó el desastroso ataque de sus padres a la ciudad de Tebas para terminar volviendo a tomar la ciudad.

     Mientras su padre fue el único superviviente de los Siete contra Tebas, Egialeo fue el único de los jefes argivos de los Epígonos que murió cuando volvieron a tomar la ciudad. Laodamante, hijo de Eteocles, lo mató en Glisas y fue enterrado en Pegas, Megáride. Adrasto murió de pena después de la muerte de su hijo y Diomedes, nieto de Adrasto por su hija Deipile, le sucedió. El hijo de Egialeo, Cianippo, asumió el trono tras el exilio de Diomedes.

          4-EGIALEO: según Eurípides es hijo de Foroneo y Peito. En su honor una región del Peloponeso se llamó Egíalo.​ Fue el padre de Europs.

Fuente: Wikipedia

sábado, 21 de diciembre de 2019

BUTES


     En la mitología griega, existen varios personajes con el nombre de Butes:

          1-BUTES: hijo del rey de Atenas, Pandión I y de Zeuxipe. Fue sacerdote de Poseidón y de Atenea a la muerte de su padre, mientras que su hermano Erecteo, heredó el trono de la ciudad. Obtuvo después de su muerte honores divinos: había un altar en el templo de Erecteo en Atenas. Se casó con su sobrina Ctonia.

          2-BUTES: era un ático hijo de Teleonte y Zeuxipe, hija ésta del dios-río Erídano. Butes se unió a los argonautas.

     Eustacio lo presentaba como hijo de Poseidón. Se decía que, cuando los argonautas pasaron junto a las sirenas, Orfeo comenzó a tocar una canción para contrarrestar la influencia de su canto, pero sólo Butes saltó al mar. Sin embargo, Afrodita lo salvó y lo llevó a Lilibea (Sicilia), donde fue con ella padre de Érix y Policaón.

     La familia ática de los Butades o Eteobutades remontaba sus orígenes a Butes, y en el Erecteión (un templo) de la Acrópolis había dedicado a Butes un altar cuyas paredes estaban decoradas con pinturas que representaban escenas de la historia de la familia.

          3-BUTES: según Diodoro Sículo, un tracio hijo del dios-viento Bóreas. Conspiró contra su hermanastro Licurgo, por lo que su padre le obligó a exiliarse. De esta forma marchó con un grupo de colonos a la isla de Strongyle, desde entonces llamada Naxos. Como él y sus compañeros no tenían mujeres, hacían incursiones para raptarlas, y así llegaron a Tesalia, donde sorprendieron a unas ménades que huyeron de ellos. No obstante, Butes logró raptar a Coronis, con quien más tarde tendría a Hipodamía. Pero Coronis, enfadada con él por haber sido raptada, invocó a Dioniso, que volvió loco a Butes, de forma que éste se arrojó a un pozo, muriendo.

          4-BUTES: un miembro de los bebricios hijo de Ámico. De él heredó su afición por la lucha. Dares lo desafió y venció en la arena, junto a la tumba del gran Héctor. En La Eneida se hace mención a esta pelea en el contexto de los juegos que organiza Eneas para honrar los manes de su padre Anquises en Sicilia.

          5-BUTES: uno de los guerreros de Eneas en Italia, a quien mató Camila.

          6-BUTES: el escudero y familiar de Anquises.

          7-BUTES: un soldado en el ejército de los siete contra Tebas, a quien mató Hemón.

Fuente: Wikipedia

domingo, 8 de diciembre de 2019

LÁBDACO

     En la mitología griega, Lábdaco era rey de Tebas, padre de Layo y abuelo de Edipo. Hijo de Polidoro y Nicteis, era nieto de Cadmo y de Nicteo. El suceso más notable de su reinado fue la guerra que mantuvo con el rey de Atenas, Pandión I, por motivos fronterizos.

     La afrenta del rey Lábdaco inicia el ciclo tebano de maldiciones y castigo que escribieron Esquilo y Sófocles. El primero a través de Los siete contra Tebas y el segundo con sus obras Edipo rey, Edipo en Colono y Antígona. El rey Lábdaco provoca la maldición entre su descendencia al negarse a realizar los ritos que demanda el dios Dioniso. Las Bacantes, sacerdotisas del dios, enfurecidas por su osadía, lo sentencian a muerte y lanzan una maldición contra los miembros de su tribu, los labdácidas.

Fuente: Wikipedia

martes, 5 de noviembre de 2019

ANFIÓN

     En la mitología griega, Anfión, es el nombre de varios personajes:

          1-ANFIÓN: es el gemelo de Zeto; ambos son hijos de Antíope y Zeus.

     Anfión y Zeto, fueron un modelo de entendimiento entre hermanos, que en vez de presentar una competencia, representaban un ejemplo de compensación: mientras Zeto sobresalía en las labores más rudas y manuales, como por ejemplo la ganadería, Anfión era el lado delicado, aficionado a la música y el Arte.

     Hermes fue su mentor; se dice que él mismo le regaló una lira y le había enseñado a tocarla, y lo hacía con tal gracia que se cuenta que en la construcción del muro de Tebas (ciudad fundada por él y su hermano y de la que fueron correyes) mientras Zeto tenía que esforzarse en cargar los pesados bloques, Anfión simplemente tocaba su lira de tal manera que las piedras le seguían espontáneamente y se colocaban en su sitio.

     Anfión estuvo casado con Níobe, hija del rey de Lidia, con la que tuvo una muy numerosa descendencia. Desafortunadamente la suerte no le acompañó, y toda su prole pereció trágicamente.

     Debido a su desafortunada historia, Anfión se volvió loco, y quiso destruir el templo de Apolo ubicado en Tebas para materializar su rabia, pero éste lo condenó a habitar en el Tártaro por esa impertinencia.

          2-ANFIÓN: un argonauta, macedonio de Pella, hijo de Hiperasio e Hipso.

          3-ANFIÓN: un aqueo comandante de los epeos de Elis.

          4-ANFIÓN: un centauro, que intentó saquear el vino de Folo y a quien mató Heracles.

          5-ANFIÓN: amigo del famoso arquitecto Epeo, constructor del Caballo de Troya. Este Anfión Murió a manos de Eneas.

          6-ANFIÓN: un defensor de Tebas contra los siete.

Fuente: Wikipedia

domingo, 20 de octubre de 2019

TIRESIAS


     En la mitología griega, Tiresias fue un adivino ciego de la ciudad de Tebas; fue, junto con Calcas, uno de los dos adivinos más célebres. Hijo de Everes y de la ninfa Cariclo, Tiresias tuvo dos hijas: Manto y Dafne.

     Tiresias es un adivino que aparece desde la época de Cadmo hasta la expedición de los Epígonos (hijos de los héroes argivos que lucharon y murieron en la primera guerra tebana): fue Tiresias quien aconsejó que se entregara el trono de la ciudad al vencedor de la Esfinge y, más tarde, sus revelaciones conducirán a Edipo a descubrir el misterio que rodeaba su nacimiento y sus involuntarios crímenes. También aparece en la Odisea, cuando Odiseo quiere saber como será su regreso a Ítaca, viaja al Hades para consultar a Tiresias.

     Tiresias no nació ciego ni adivino. Según la versión de Ferécides de Atenas, Tiresias, adolescente, sorprendió a Atenea cuando se bañaba desnuda en la fuente Hipocrene en el Monte Helicón.​ La diosa consideró esta indiscreción de Tiresias como un atentado contra su pudor, y «Atenea le puso entonces las manos sobre los ojos y lo dejó ciego».

     La madre de Tiresias, la ninfa Cariclo, que formaba parte del cortejo de Atenea, suplicó a ésta que le devolviera la vista a su hijo. La diosa, puesto que no tenía el poder para deshacer el acto, le concedió otro don: «Ella le purificó las orejas, y esto le permitía comprender perfectamente el lenguaje de los pájaros; después ella le dio un bastón de cornejo, gracias al cual caminaba como las gentes que veían». Atenea le concedió igualmente una vida más larga que la del común de los mortales y el poder de guardar sus dones en los infiernos.

     En la segunda versión, según Ovidio, mientras Tiresias paseaba por el bosque en el Monte Cilene, en el Peloponeso, encuentra a dos serpientes que estaban apareándose y separa con un golpe de su bastón. Hera, disgustada, lo transforma en mujer. Tiresias permanece con esta apariencia durante siete años y se convierte en sacerdotisa de Hera. Se casa y tiene una hija, Manto, que también heredará el don de la profecía. El octavo año, Tiresias-mujer vuelve a ver de nuevo a las mismas serpientes aparearse. Según unas versiones las dejó tranquilas, según otras (Higino), las volvió a pisotear. Como premio a su comportamiento, Hera le levantó el castigo y le devolvió su masculinidad. Ovidio dice: «Si cuando se os castigó, le dice, vuestro poder es tan grande para cambiar la naturaleza de vuestro enemigo, voy a cambiaros una segunda vez».

     En una discusión en el Olimpo, Zeus pretendía que en el acto sexual la mujer sentía más placer que el hombre y su esposa Hera pretendía lo contrario. Los dioses decidieron pedir el consejo de Tiresias, que tenía la experiencia de ambos sexos. Tiresias se pone de parte de Zeus, y declara: «De diez partes un hombre solamente goza de una». Hera inmediatamente lo volvió ciego por su impiedad. Zeus no podía ir en contra de la decisión de Hera, pero, para compensar su ceguera, le ofreció el don de la adivinación y una larga vida de siete generaciones humanas.

     La última versión corresponde ya a la época helenística, ampliándolo al menos en siete episodios, con amores apropiados en cada uno de ellos. Este relato cuenta que Tiresias habría nacido del sexo femenino y que, como toda joven, suscitó el deseo de Apolo. El dios, a cambio de sus favores, le enseñó música. Cuando creció, Tiresias-mujer rechazó a Apolo. Éste la convirtió entonces en hombre para que sintiera lo que es el deseo, el empuje que propicia Eros. A partir de esta primera metamorfosis y después de haber sido el árbitro de la disputa entre Zeus y Hera sobre la cuestión del placer sexual, Tiresias sufriría no menos de seis cambios de un sexo al otro.

     El Pseudo-Apolodoro cuenta que Anfitrión consultó al adivino para resolver el misterio del «impostor» que, durante su ausencia, había tomado su apariencia y había compartido el lecho de Alcmena.

     Por otra parte, Píndaro y Teócrito, han tratado este motivo en el nacimiento de Heracles: sus obras respectivas hacen mención de una intervención diferente del adivino Tiresias con ocasión del nacimiento del héroe.

     La primera, Nemeas, de Píndaro, estaba destinada a la celebración del vencedor de un concurso de carros en los juegos: sus cualidades y su sagacidad son así comparados a los de Heracles. Tras las primeras hazañas del recién nacido, que abate a las serpientes enviadas por la vengativa Hera, Anfitrión, padre de Alcide (Heracles), a la vez asombrado y entristecido por su fuerza y su coraje fuera de lo común, consulta a su ilustre vecino: el adivino va así a ser el intérprete del destino del semidios, de sus futuras hazañas, así como de la inmortalidad junto a su padre que le es prometida. Teócrito, en su 24º Idilio, narra la predicción de su gloria futura que hace el adivino Tiresias. El final del poema describe la extraordinaria educación del hijo de Zeus.

     Tiresias aparece como un personaje recurrente en las tragedias griegas que narran la legendaria historia de Tebas. Cronológicamente, el primer episodio en ser llevado a escena, se encuentra en la tragedia de Eurípides Las bacantes. La pieza tiene por contexto la instauración violenta del culto de Dioniso en Tebas: el adivino aparece con Cadmo, fundador y primer rey tebano, y uno y otro son de los pocos personajes oficiales en tomar partido en favor del nuevo dios.​ Cadmo y Tiresias, disfrazados de mujeres, viajan a las montañas para honrar a Dioniso y unirse a las bacantes tebanas en las fiestas en honor a él. 

     Otro episodio aparece en Edipo rey, de Sófocles. Con respecto a la historia contada en Las bacantes, el tiempo mitológico ha avanzado cuatro generaciones. La peste se ha abatido sobre Tebas: Creonte, el cuñado de Edipo, dando respuesta al oráculo de Delfos, revela que es necesario purificar el país de la deshonra producida por el asesinato del anciano rey Layo. Tiresias es llamado por el rey a fin de que denuncie a los asesinos. Al principio se niega a dar respuestas directas, y, ante las demandas del rey, la violenta disputa que sigue le impulsará a decir que el rey no desea realmente que aparezca el asesino. Espoleado por las acusaciones del rey de que no tiene ninguna visión o de que, aún peor, ha tomado parte en el conspiración, Tiresias finalmente le revela que el verdadero asesino es el propio rey. Ultrajado, Edipo lo expulsa del palacio, pero al poco comprende la verdad.

     La obra siguiente es de Eurípides: Las fenicias. Una vez Edipo ha entregado el trono a sus hijos Eteocles y Polinices, éstos deciden repartirse el poder, cada uno aceptando reinar alternativamente durante un año. La maldición de Edipo cae entonces sobre ellos: su padre les ha maldecido y están condenados a matarse entre ellos, después de que hubieran recluido a su padre en el palacio. Así, el conflicto estalla desde el primer año: Eteocles, tirano ávido de poder, rechaza dejar el trono. Polinices, con la ayuda de los siete jefes, asedia su propia ciudad. Al final, ambos hermanos combaten en un duelo que acaba en la muerte de ambos atravesados por sus lanzas. Los tebanos ganarán la guerra gracias a las profecías de Tiresias, que revela la necesidad de ofrecer en sacrificio al hijo de Creonte: Meneceo.​ La historia de la guerra la cuenta Esquilo en su obra Los siete contra Tebas.

     El último episodio aparece en la obra de Sófocles Antígona, y es la continuación de Las fenicias. Creonte, nuevo rey de Tebas, decide entonces celebrar los funerales solemnes de Eteocles, pero prohíbe dar sepultura al «traidor» Polinices, conforme a las órdenes dadas por Eteocles antes de morir. Antígona, su hermana, no respeta la prohibición: recubre el cadáver de tierra y celebra los ritos fúnebres. Creonte la descubre y es condenada a ser enterrada viva. Los dioses no aprueban la medida, y cuando entra en escena Tiresias es para hacer que Creonte respete las inmutables leyes divinas que ordenan dar sepultura. Se revela así plenamente su papel de consejero político, aconsejando al jefe del estado. Sin embargo, frente a las revelaciones de Tiresias, la naturaleza colérica y autoritaria del tirano va rápidamente retornando: a quienes intentan hacerle razonar y mostrarle las amenazas que pesaban sobre su cabeza, Creonte les responde con insultos. El adivino se retira entonces, anunciando el castigo inminente de los dioses: la muerte para todo aquél que vea la muerte de Antígona. Creonte tiene miedo y suspende la ejecución, pero Antígona, antes de ser enterrada viva, decide ahorcarse. Cuando llega Creonte, su propio hijo Hemón, que era amante de Antígona, intenta matarlo, y después se suicida. Cuando Euridice, mujer de Creonte, es informada de la muerte de su hijo, también se quita la vida.

     La muerte de Tiresias, tuvo lugar durante la toma de Tebas por los Epígonos, los hijos de los Siete de Tebas que habían participado en la primera expedición contra la ciudad beocia.

     Según Pseudo-Apolodoro,el anciano adivino huyó de la ciudad con los supervivientes tebanos y que, al hacer un alto en su compañía cerca de la fuente Telfusa, murió tras haber bebido agua muy fría de la fuente. Pausanias, por su parte, declara que el adivino, así como su hija Manto, permanecieron en el interior de la ciudad, donde fueron hechos prisioneros por los argivos, que decidieron enviarlos a Delfos, para allí ser consagrados al dios Apolo.​

     La avanzada edad de Tiresias no le permitió completar la totalidad del trayecto, y murió cerca de la fuente Telfusa, donde se encontraría su tumba, que Diodoro sitúa precisamente en el monte Tilfusio, cercano a esa fuente.

     La versión del mito de Calímaco explica que Tiresias había obtenido de Atenea la facultad sobrenatural de conservar su espíritu tras la muerte. Es provisto de este don que hace su aparición en la Nekuia, un episodio de la Odisea: para consultar a Tiresias, Odiseo se dirige al Hades, ya que necesita saber todo lo concerniente a su regreso, la situación de Ítaca y sus otras posibles hazañas. El héroe, siguiendo los consejos de Circe, cumple las libaciones y sacrificios necesarios para entrar en contacto con las almas de los difuntos. La sangre de las víctimas sacrificadas, cayendo en el abismo, hace subir del Hades las almas de los muertos que desean ser interrogadas: sólo después de haber bebido podrán conversar con Odiseo. La sombra de Tiresias debe, sin embargo, beber la primera, como si dispusiera además de una cierta preeminencia en el Hades: en efecto, Tiresias es presentado por Circe como «el ciego, que no ha perdido nada de su espíritu», mientras que las otras almas son consideradas como las «cabezas sin fuerza de los muertos». En fin, Tiresias es descrito como «llevando un cetro de oro», un símbolo del poder que le ha sido reconocido.

     Beneficiándose así de este favor, puede todavía decir lo que han resuelto los dioses y predecir a Odiseo todas las trampas que le esperan en su regreso. Después de haber explicado la causa del odio de Poseidón, que persigue a Odiseo y a sus compañeros por haber dejado ciego a su hijo el Cíclope, el adivino prodiga sus consejos: entre ellos, el de respetar a toda costa el ganado de Helios. De otro lado, anuncia al héroe que la masacre de pretendientes que deshonran su casa no será para él la última aventura: deberá todavía volver a partir hasta que encuentre a una tribu que no sepa de la existencia del mar, y hacer allí un sacrificio a Poseidón. Sin embargo, a pesar de la ayuda de Circe y de Tiresias, Odiseo no conseguirá evitar la isla de Helios, donde sus compañeros comprometerán definitivamente su suerte de regresar a Itaca. Sólo Odiseo volverá a su isla, donde contará a su esposa Penélope el extraño encuentro con el adivino «muerto».

Fuente: Wikipedia

jueves, 6 de junio de 2019

TERSANDRO

Ruinas de Tebas, Grecia
     En la mitología griega, Tersandro fue uno de los Epígonos, que eran los hijos de los héroes argivos (Argos) que lucharon y murieron en la primera guerra tebana. Polinices (padre de Tersandro) y seis aliados (los siete contra Tebas) atacaron Tebas porque el hermano de éste, Eteocles, rehusó cederle el trono, como había prometido. La segunda guerra tebana, también llamada guerra de los epígonos, sucedió diez años después, cuando éstos, queriendo vengar la muerte de sus padres, atacaron Tebas.

     Tersandro tal vez sobornó a Erífile con el manto de Harmonía para que ella enviara a su hijo Alcmeón a pelear junto a él. Su padre hizo lo mismo con el collar de Harmonía para convencerla de enviar a su esposo con los atacantes originales. El ataque de los Epígonos tuvo éxito, y Tersandro se convirtió en rey de Tebas. Tersandro intentó luchar a favor de los griegos durante la guerra de Troya, pero fue muerto por Télefo antes de que comenzara la guerra, mientras que los griegos habían parado por error en Misia. Fue sucedido por su hijo Tisámeno, cuya madre fue Demonasa.​

     Píndaro se refiere a Tersandro como acreedor de honor después de la muerte de Polinices y por preservar la casa de Adrasto para las futuras generaciones.

     Existen ciertas referencias controvertidas en la Eneida de Virgilio que citan a Tersandro como uno de los guerreros que se escondieron en el caballo de Troya. Pero si Tersandro fue asesinado por Télefo en su camino hacia las costas de Troya en Misia, no podría haber estado en el caballo de Troya 10 años más tarde.

     En otra fuente, Tesandro, era hijo de Sísifo, padre de Hallarlo y de Corono.

     Fue padre de Hilo (madre Aretusa), que murió en la Guerra de Troya.